Observo lo que me rodea.
Pienso que para crear
hay que saber mirar.
Busco vivir en serendipia.
Creo que toda historia
tiene un comienzo:
el cruce de una mirada,
alguien que camina por la calle,
un pájaro en la ventana,
una charla de bar.
Entran sin permiso,
pasan del lápiz al papel
de mi cuarderno de notas
y comienzan a latir
en ese limbo de ideas
hasta convertirse en realidad.
El arte es espíritu
expresado en materia.
El Libro de Artista
es el medio por el cual
el mío halló la comunión
entre imágenes y palabras.
Espero que quien entre
en contacto con mi obra
lo haga propio,
lo transforme
y reinicie
la cadena creativa.